Los «servicios de interés económico general» tras el Tratado de Lisboa: de la excepción a la regulación positiva

Palabras clave
Derecho UE, Tratado de Lisboa, servicios de interés económico general, derecho de la competencia, ayudas de Estado, base jurídica, jurisprudencia Altmark
Resumen
Los servicios públicos han sido considerados inicialmente de forma tímida en la UE a través de la noción de servicios de interés económico general (SIEG). En la primera parte de este trabajo, se analiza la aplicación por parte de la jurisprudencia del TJUE de la excepción sobre los SIEG recogida en el artículo 106.2 TFUE, donde destaca la priorización del derecho de la competencia sobre los SIEG. El examen del ámbito de aplicación y la propia noción de SIEG resulta muy relevante desde el punto de vista de la delimitación de competencias entre la UE y los Estados miembros. Además, el régimen jurídico de los SIEG se ha visto sometido a un doble escrutinio, basado en los artículos 101 y 102 TFUE en una primera fase, mientras que ha sido su aplicación con respecto al artículo 107 TFUE el que ha generado más litigiosidad con posterioridad. Por otro lado, la normativa derivada de la UE relativa a los servicios prestados por las industrias en red ha procurado introducir la competencia y la liberalización en estos sectores, regulando a la par el servicio universal, que se configura como un mínimo obligatorio para los prestadores de estos servicios y funcionalmente equivalente a los SIEG.

En segundo lugar, se analiza la evolución experimentada en el Derecho primario de la UE hacia una mayor consideración de los SIEG. El Tratado de Ámsterdam primero, la Carta de Derechos Fundamentales después, y finalmente las modificaciones introducidas con el Tratado de Lisboa (ya anunciadas por el Tratado Constitucional) dibujan un panorama mucho más prometedor para la consideración de los SIEG en el Derecho de la UE, en particular, para su elevación al rango de valor constitucional. Además, se analiza la propuesta relativa a la adopción de una normativa horizontal sobre los SIEG, que permitiría introducir una regulación positiva de carácter transversal con gran alcance para estos servicios, aunque esta posibilidad no estaría exenta de cuestiones jurídicas problemáticas.
Keywords
EU law, the Treaty of Lisbon, services of general economic interest, competition law, state aid, legal basis, Altmark case-law
Abstract
Public services have been initially considered in a limited way in the EU through the notion of services of general economic interest (SGEI). In the first part of this paper, we examine the case-law of the CJEU to show the application of the exception regarding the SGEI set up in article 106.2 TFEU, where the prioritization of competition law over SGEI predominates. The analysis of its scope of application and also of the very notion of SGEI turns out to be extremely relevant from the point of view of the division of competences between the EU and the Member States. Moreover, the SGEI’s legal regime has been subjected to a double scrutiny; on the one hand, one based on the application of articles 101 and 102 TFEU in the first phase, whereas its application with respect to article 107 TFEU has subsequently generated more cases. In addition to the case-law, EU secondary legislation on services provided by network industries has brought in competition and liberalization in these sectors, while regulating the universal service, which in turn has been arranged as a compulsory minimum on the part of the providers and as a functionally equivalent to the SGEI.

In the second part of this paper, we assess how EU Primary Law has evolved towards a higher valuation of the SGEI. The Treaty of Amsterdam first, the Charter of Fundamental Rights secondly, and finally the modifications set up by the Treaty of Lisbon (already announced by the Constitutional Treaty), all together point to a new horizon, much more promising regarding the appraisal of SGEI in EU Law, in particular, with respect of its elevation to the rank of a constitutional value. In addition, we analyze the proposition of a horizontal legislation in the field of SGEI. This legislation may serve to incorporate positive regulation of a transversal character, perhaps with great reach for these services, although some problematic legal issues need to be solved before this possibility takes shape.