Vulneración de Derechos Fundamentales por la obligada transposición de normativa europea. El conflicto entre el deber de colaborar con la Administración sancionadora y el derecho a no declarar contra uno mismo

Palabras clave
Legislación de mercado de valores
obligación de cooperación con autoridades administrativas
derecho a guardar silencio
cuestión prejudicial sobre derechos fundamentales
diálogo entre tribunales.
Resumen
La sentencia que constituye el objeto de este comentario resulta interesante  desde una doble perspectiva: (i) como delimitación del derecho sustantivo a guardar  silencio ante una incoación de un procedimiento administrativo sancionador.  Se analiza el equilibrio entre el deber ciudadano de colaborar con la Administración,  especialmente en los casos de infracciones relativas a sectores altamente regulados  como es la operativa del mercado de valores y el derecho sustantivo a no declarar  coactivamente o a no contribuir a la autoinculpación. En este sentido, el TJUE ha  extendido tradicionalmente las garantías del proceso penal al procedimiento administrativo  sancionador cuando el resultado del mismo sea de tal entidad que puede  conllevar la imposición de sanciones administrativas «de carácter penal». 

En segundo lugar (ii), desde el punto de vista procesal, resulta interesante analizar

las esferas de protección de los derechos fundamentales dentro de la UE. La  controversia surge a raíz de una cuestión de inconstitucionalidad que eleva la Corte  di Cassazione italiana. El juez de garantías constitucionales, a su vez, refiere una cuestión prejudicial de interpretación y validez del propio derecho europeo derivado  respecto de la Carta Europea de Derechos Fundamentales. Y el juez europeo construye su doctrina en base a la del TEDH aplicando la «cláusula de homogeneidad»

del art. 52.3 de la Carta. Se constatan, pues, para resolver una misma afectación a  los derechos fundamentales en juego, al menos tres círculos distintos que implican  a cuatro altos tribunales.

Este segundo aspecto centrará nuestro análisis.
Keywords
Regulation of stock markets; duty to collaborate with administrative authorities;right to remain silent and not to self-incrimination; preliminary ruling involving the European Charter of Fundamental Rights; Judicial dialogue among Courts.
Abstract
The judgement we present is interesting from a double perspective: (i) as a  delimitation of the substantive right to remain silent before the initiation of an administrative  sanctioning procedure. The judgement analyzes the balance between the  citizen’s duty to collaborate with administrative authorities —particularly in cases  of conducts related to highly regulated sectors such as the operation of the stock market— and the substantive right not to declare coercively or not to contribute to  self-incrimination. In this sense, the ECJ has traditionally extended the guarantees of  the criminal process to administrative sanctioning procedure when the result thereof  is of such an entity that it may lead to the imposition of administrative sanctions  «of a criminal nature».

Secondly (ii), from a procedural point of view, it is interesting to analyze several  spheres of protection of fundamental rights within the EU. The controversy arises as  a result of a question of unconstitutionality raised by the Italian Corte di Cassazione.  The judge of constitutional guarantees, in turn, refers a preliminary ruling of interpretation  and validity of European law itself with respect to the European Charter of  Fundamental Rights. And the European judge builds his doctrine based on that  of the ECHR by applying the «homogeneity clause» of article 52.3 of the Charter.  Thus, to resolve the same violation of the fundamental rights at stake, there are at  least three different circles involving four high courts.

This second aspect will focus our attention